Blanco cálido – para relajarse
Para la mayoría de las personas el color blanco cálido es el más agradable. Tiene un tono finamente amarillo y le emiten las bombillas clásicas y bombillas halógenas así como tubos fluorescentes y bombillas LED más caras. En las bombillas LED se ultimamente usa una luz más blanca que la amarilla (como la en bombillas clásicas). Intentan acercarse a la luz diurna normal, y el color demasiado amarillo no es bueno para los ojos.
El color blanco cálido se recomienda para las habitaciones donde queremos relajarnos o sentirnos cómodos. Por ejemplo en el dormitorio, salón o en la habitación de niños.
Blanco diurno – para trabajar
Las fuentes de luz con el color blanco diurno (o blanco neutro) se usan mucho en el hogar. Las fuentes de luz con este color son adecuadas donde realizamos alguna actividad y necesitamos "ver bien sin un tono amarillento". Se recomendan para cocinas, baños, pasillos y para la habitación infantil o la oficina.
Blanco frío – para actividades
El tercer tipo son las funtes de luz con el color blanco frío. Su luz es muy clara, fuerte y a veces tiene un tono azulado. Este color fomenta la concentración y es menos cansado para los ojos (adecuado para trabajar en el ordenador). Estas fuentes de luz podemos encontrar en las oficinas, espacios comerciales y naves industriales. También se utilizan en las habitaciones oscuras, como bodegas.
Temperatura de color en la escala Kelvin
¿Y cómo saber a qué grupo de colores pertenece una fuente de luz en particular? Necesitamos saber cuántos Kelvins tiene, cuál es su temperatura de cromaticidad. El número de Kelvin debe indicarse en la caja de cada fuente de luz. Y se aplica una regla simple: cuanto más kelvin, más blanco hasta azulado es el color.
Al enumerar la información sobre el color de la luz es también interesante mencionar la investigación del físico holandés Andries Kruithof. Llamó la atención sobre la relación entre la coloración de la fuente de luz y la intensidad de la luz. Según él, con niveles de luz bajos las personas prefieren la coloración cálida, mientras que a medida que aumenta la intensidad de la luz, prefieren las fuentes con un mayor número de kelvin. Con la intenidad de 20 lx, la gente prefiere la luz a unos 2.000 K, y a 300 lx, la luz que tiene más de 4.000 K.
